Orión

Ha surgido, he surgido, muerte sustanciosa que queda en la sustancia, desplazamiento de lo que queda, muy acá de la palabra; entonces anda con el viento, tan conmigo: he muerto un poco más esta mañana. Muerde qué gloria ni qué silencio, muerde muerte su deslizamiento en cada pliego de estar presente, de no estar para quiénes, de estar para cuántos vacíos, y no ser sino estar siendo, aunque nunca, ¡qué sé yo!, qué sabe la vida de la vida misma, Dios mío, qué saben las yemas de mis dedos lo que van escribiendo, y qué sabe nadie: he muerto un poco más esta tarde. Va muriendo todo junto con mis ojos, como muere la tarde en amalgama entristecido, y cabalga la tarde un caballo salvaje hasta nunca jamás, porque qué más da estar o no, ir o venir, o maldecir, o estar contento, ¡quién sabe nada! Padre, lo que se olvida no se olvida nunca, sino que viaja en la maletera de estar yendo siempre con un nuevo día, con un acontecimiento sobre otro; allí, en el invierno de nuestros veranos, papá, en la juventud de nuestras canas; y siempre vuelven a surgir, tú más que cualquiera lo sabe; surgen cristalinos, enjugando nuestra historia, papá, tú más que cualquiera lo sabe. Estoy, para no sé cuánto desistir, o cuánto desinterés: La vida, ¿qué significa estar vivo? Y por qué nos significa más lo contrario, de lo contrario, de lo contrario. La muerte es, la vida no, la muerte queda, petrificada situación en la memoria; la vida siempre va yendo, va quedando, va yendo y quedando, entonces como siendo nada al mismo momento que todo: he muerto un poco más esta noche. Hay veces en que creo hay un lugar entero donde no quepo, un lugar llamado todo. Es una universal negación: ¡qué sé yo! Qué sabe nadie, Madre, bien llamada nostalgia, Madre de todos mis sueños, abuela del vacío ¡quién te dijo que continuaras, quién! Y yo que de mañanas me compongo, no repongo aún en significar apenas: ¿Por qué? Mañana más tarde, mañana más tarde, mañana más tarde caerá el mundo sobre mis hombros, caerá tu nombre, tu tristeza, tus plegarias sin destino: He muerto un poco más en esta madrugada. 

Luis Ernesto 

No hay comentarios:

Publicar un comentario